Noticias.- El caso de Renata “N” se originó cuando la niña de 13 años descubrió un teléfono en el baño que la grababa al ducharse, aparato que, según los reportes, pertenecía a la pareja de su madre.

Aunque la menor presentó una denuncia, las autoridades determinaron que no procedía. Meses después, el hombre ingresó al domicilio donde vivía la menor, privándola de la vida.

Tras un año de investigaciones, fue detenido y vinculado a proceso, pero antes de recibir sentencia, la madre de Renata fue informada que el señalado había sido encontrado sin vida en su celda, mientras continúa expresando que una intervención oportuna pudo haber evitado el desenlace. El hecho sucedió en noviembre del 2020, en Ixtapaluca, Estado de México.