Los millennials, es decir, la generación nacida entre 1980 y mediados de 1990, representa la cuarta parte de la población en México; según el INEGI, es una generación de adultos jóvenes que han tenido que adaptarse a cambios, entre los más importantes, pasar del empleo formal a los contratos temporales o el emprendimiento o todo al mismo tiempo.
"¿A qué no me dedico? Soy docente universitaria, además soy Directora de la Facultad de Derecho de la Universidad Incarnate Word, tengo un pequeño negocio que me ha permitido y me ha abierto las puertas para entrar a algunas empresas, soy proveedora de medicamento, y además estoy trabajando en un partido político...” Eira Zavala Durán, millennial.
El INEGI dio a conocer en 2023, que el sueldo mensual promedio de este grupo es de 10 mil 131 pesos, según la misma fuente, es la generación en la que más personas han alcanzando niveles educativos de posgrado, pero también es una generación que ha privilegiado la búsqueda de bienestar emocional sobre otros aspectos.
“Siempre tuvo más peso la pasión o el gusto por hacerlo, ya después me di cuenta de que afortunadamente sí hay bastante campo laboral” Jesús Gerardo Reglado Villalobos, millennial.
Tanto Eira como Jesús coinciden en que es importante mantenerse actualizado, consideran muy importante la salud mental, pero sin menospreciar la estabilidad económica, no les gusta que les digan “señor”, pero ya han comenzado a prevenir el futuro.
“Hasta recientes fechas empiezo a percatarme de que, como profesionista, ejerciendo de manera independiente, pues sí estamos como en el limbo, entonces hay que empezar a planear un futuro, y empecé a razonar en este tipo de cosas como: a ver, vamos haciendo un ahorro, vamos pensando en un seguro de vida, vamos pensando en nuestra vejez’” nos contó Eira Zavala Durán, millennial.
Según el observatorio laboral, 42% de los millennials tienen dos o más trabajos, además es una generación consciente de la precariedad de los puestos laborales por lo que privilegian consumir en experiencias como viajes o espectáculos y no sienten confianza de adquirir responsabilidades económicas a largo plazo, razones por las que pareciera que se niegan a abandonar la juventud, aunque los años se imponen.
