A los funcionarios de Campeche les encanta hacer el ridículo, tanto, que ni con el pueblo son capaces de quedar bien. En mero festejo navideño, su administración es tan mala, que ni el encendido del árbol pudieron hacer bien.
Pero con quienes sí pueden quedar bien, es con su jefa... la gobernadora Layda Sansores, pues de tanto que la “cajetean”, tienen que andar de “paleros”, literalmente, para que se le olvide que hacen mal su trabajo.
A otro que ‘nomás le gusta estar haciendo el ridículo, es al secretario del Bienestar, Esteban Hinojosa Rebolledo, después de ser criticado por andar semiencuerado en sus redes sociales, pues sólo por eso lo conocen, y no por su trabajo.
Aquí, la verdad es evidente, la gobernadora de Campeche tiene un “despapaye” en su Gobierno.












