Noticias.- ¡El guardián del campanario! Don Aurelio, el hombre que mantiene viva la historia de Silao.
En el corazón de Silao, la parroquia de Santiago Apóstol se alza con siglos de historia, y en lo alto de su campanario don Aurelio, de 76 años, ha hecho de las campanas su vida y su familia desde que entró a trabajar en 1986 invitado por su hermano. Con casi cuatro décadas de repiques, él no sólo llama a misa: acompaña con bronce la alegría de las fiestas patronales, la solemnidad de los duelos y el llamado de la fe que une a su pueblo.Entre puertas de mezquite, campanas y la escultura de Santiago Apóstol,, don Aurelio conserva viva la identidad de Silao y confiesa que, cuando sus manos ya no puedan subir al campanario, su único deseo será que su familia lo lleve al jardín para seguir escuchando los sonidos que han marcado su vida.