En el Pueblo Mágico de Mineral de Pozos, cámaras y vecinos registraron bolas de fuego desplazándose por los cerros este 21 de octubre. Y no es la primera vez, pues en el cerro de los Ates, en Apaseo el Alto, también se han reportado fenómenos similares.

Los lugareños no lo consideran un efecto natural. Según las leyendas, estas esferas son brujas recorriendo los montes durante la noche, protegiendo secretos ancestrales o realizando rituales ocultos. Para quienes viven cerca, estas apariciones son parte de la historia viva de la región.